El técnico explicó que su marcha no tiene que ver con lo económico
«Tal y como siento que me han tratado, hoy por hoy, no me quedó en el Oquendo ni por todo el oro del mundo». Así de contundente se mostraba ayer Hugo Nava, ex técnico del Avilés Oquendo, tras conocerse el pasado viernes que no continuaría la próxima temporada en el banquillo avilesino. El técnico, que devolvió al Oquendo a División de Plata, donde militará la próxima campaña, siente que el club ha querido que se fuera «por la puerta de atrás»: «No me voy por un tema económico como el club quiere hacer ver, nunca entrené al equipo por dinero. Sólo tenían que haber enfocado la negociación de otra forma, porque creo que la directiva no me ha dado opción», comentó Nava. Según explica Hugo Nava, las conversaciones con el presidente del club, Paco Penedo, sobre su continuidad comenzaron el lunes de la pasada semana: «Estuvimos hablando de la planificación de la próxima temporada. Después, Paco me dijo que contaban conmigo y me dio la oferta, menor que con la que empecé el año pasado», afirma el técnico. «Me resultaba extraño hablar de dinero antes de tener cerrado el presupuesto. Paco no había hablado todavía con el Ayuntamiento, con el Principado ni con los patrocinadores. No dio lugar a ninguna negociación», reitera el técnico poleso. Nava explica que el miércoles recibió una llamada del presidente para decirle que quería enviar un comunicado sobre su salida: «Paco quería poner una serie de motivos que no eran ciertos y dijo que tenía que ser lo antes posible porque había que empezar a buscar otro técnico», comenta. Fue entonces cuando Nava le pidió una segunda reunión: «Quería que me explicara la llamada porque se suponía que contaban conmigo y yo lo estaba pensando». En esa segunda conversación el ambiente no fue mejor: «Fui con Viti, el entrenador del juvenil, y dije que me parecía que no se estaban haciendo las cosas bien y que no nos sentíamos valorados. No sé qué pretendían, pero si hubiesen querido que me quedara no hubieran dicho que esa oferta es la que hay y ya está. Sentí que me estaban abriendo la puerta», afirma Nava. Al día siguiente el técnico se despidió de la plantilla y, aunque el viernes recibió una llamada del presidente pidiéndole que recapacitara, ya no había vuelta a atrás. «No di ninguna cifra porque no me dieron pie. Si me moviera el dinero no habría venido», reiteró el técnico poleso. Nava afirmó que le hubiese encantado quedarse en el equipo: «Ha sido una temporada difícil, pero muy buena. Todo, hasta el lunes pasado, ha sido bueno», comenta. Nava quiso concluir con el capítulo de agradecimientos, en especial a Viti y Dani, el preparador físico, que abandonan el equipo para apoyar a su compañero. «Quiero dar las gracias a todos los jugadores de la plantilla, al cuerpo técnico, a los delegados, al encargado del material, a los juveniles y a sus padres, por haber sufrido conmigo este año, por su apoyo en los momentos difíciles y por ayudar a conseguir el mayor éxito del Oquendo en su historia, ser campeones. Pediría a todos que sigan apoyando al equipo en esta nueva etapa por el bien de Avilés y del fútbol sala asturiano y a lo mejor volver a reír juntos», afirmó.
Fuente: La Nueva España: 01/06/2.009
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